Señala Thoreau, que cuando caminamos nos dirigimos naturalmente hacia los bosques. Lo expone, como dando a entender que quizá los bosques posean características atractivas, o bien ejerzan un sutil magnetismo sobre aquellas personas que sienten el impulso de salir a pasear.
Es posible, incluso, que siempre estemos caminando en dirección hacia los bosques. Con independencia de adonde nos dirijamos.
Juan Millás. Serie Bosque fingido.
Siempre nos dirigimos hacia los bosques sin saberlo. Nunca lo había pensado, pero tiene todo el sentido del mundo. Así es la vida.
ResponderEliminarTienes razón. Aquí, en Mareo, la senda para pasear está rodeada de bosques. Volveré a recorrerla. La foto es preciosa, parece de cuento.
ResponderEliminar